“LA SONRISA DE PEDRO”
Había una vez un niño llamado Pedro, tenía 7 años, era rico, moreno como los conguitos, desagradecido y siempre iba bien vestido.
Pedro tenía muy buenos amigos y un día se pusieron hablar de los juguetes que tenían, sus amigos no tenían tantos juguetes como él.
A Pedro le regalaban juguetes casi todos los días, pero cuando tenía los nuevos, dejaba los otros juguetes abandonados por el suelo. Pedro tendría que empezar a pensar en los niños necesitados, porque muy poca gente tiene tantas cosas como él y algunos no tienen nada.
Un día Pedro se enfadó porque en una semana no le habían traído juguetes nuevos y a sus amigos le compran solo lo necesitado.
Pedro aprendió de sus amigos que todas las cosas cuestan mucho dinero.
El, ya estuvo alegre para siempre y le daba igual que no le trajeran regalos, lo que le importaba era su familia y que sin sus padre él no estaría en este pedazo de mundo maravilloso.
Pedro le iba diciendo a todo el mundo lo maravillosa que es la vida. Descubrió que es mejor jugar con tu familia y divertirse en vez de estar jugando solo y amargado como un árbol.
Desde entonces lo que quería Pedro es estar con sus amigos y algunos juguetes que tenía se lo dio a las ONG, para que los niños pobres también puedan decir que la vida es el mejor regalo que hayan tenido en toda la vida.
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